Como la pequeña Dorothy, en "El Mago de Oz", veo como un huracán se lleva por delante y a su paso todo lo que puede, pero a diferencia de ella, el huracán no me alcanza, no me sube por los aires y no me lleva a ninguna parte, sólo, de vez en cuando, su fuerza me sacude y me hace ver la realidad.
No sé muy bien cual es esa realidad. La verdad es que he optado por mirarla a través de un caleidoscopio, donde hay múltiples colores. Lo que sé y lo que siento es lo que se me cuenta a través de un frio y lejano teléfono, a través del cual tengo que imaginar e intuir el qué y el cómo de las distintas situaciones que provocan que la realidad se turbe. La distancia no hace el olvido, porque para olvidar hay que dejar de sentir y eso cuando se trata de la sangre es imposible. Me gustaría estar siempre y resulta que nunca estoy cuando tal vez más se me necesite, pero no puedo afligirme por ello. La vida tiene un curso, unas etapas y ésta tiene este momento.
Ánimo, comprensión y fuerza es todo lo que puedo mandar desde esta distancia.
"La vida es un conjunto de pequeños dramas y todos juntos forman una gran comedia".
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No por estar más lejos se está menos cerca, sólo hay que saber y querer ayudar...Con palabras, consejos, ánimos, lágrimas, risas, da igual, lo importante es que el "alma" llegue, y esa no entiende ni de metros ni kilómetros!!!
ResponderEliminarSeguro q ayudas mucho más de lo crees.
Ánimo pequeña, q eres grande!!!
Besos